Si alguien está inspirado en esta serie, ese es Ozzie Albies, quien fue fundamental en la primera entrada gracias a su velocidad, y permitir que Adam Duvall conectara el Grand Slam que encendió todo el Sun Truist Park.
Los Bravos de Atlanta llegaban al quinto juego de la Serie Mundial con foja de 3-1 sobre los Astros de Houston quienes han sido maniatado en los últimos dos donde perdieron 2 a 0 y 3 a 2 gracias a un gran relevo monticular. A toda costa los visitante están obligados ganar para poder mudarse a su casa y tener un respiro para continuar con su sueño de la corona.
En la parte baja de la primera entrada, Ozzie Albies llegaba a tomar turno al bate frente a los lanzamientos de Framber Valdéz, donde le propinó un machucón a las manos de Carlos Correa para doble play pero la velocidad del camarero fue superior quedando quieto en primera y dejar el inning vivo, donde con las bases llenas Adam Duvall sonó un Grand Slam para colocar selló en el juego.
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Ozzie Albies fue parte clave donde tomó una base adicional con el imparable de Austin Riley, dejando vivo el inning con casa llena, era el sexto Grand Slam de Adam Duvall en su carrera en la MLB, y el primero de su carrera en las postemporadas. Dejando a los Astros sin respirar desde el principio.
