Los umpires de la MLB hacen tanta noticia como sus propios jugadores, en este caso es con algo sucedido en el que pudo haber sido el juego perfecto de Julio Urias en el partido del domingo contra los Gigantes de San Francisco.
La diferencia entre un juego perfecto y una apertura más puede decidirse en apenas un swing, en una llamada, en cosas de pocos segundos. En medio de una temporada repleta de partidos sin hits, hay una razón por la que nadie ha alcanzado la perfección. De hecho, ningún lanzador de Grandes Ligas ha logrado un juego perfecto desde 2012. Es difícil de lograr.
Pero Julio Urías logró llevar un juego perfecto hasta la parte baja de la entrada, en un conteo de 1-2 para Mike Tauchman en el plato, este hizo un swing que para los fans se vio que su bate cruzó el plato, pero para los umpires no fue así, lo que resultó en una bola, y en el siguiente lanzamiento a Urías se le acabó el juego perfecto.
Este fue el swing de Tauchman donde los umpires determinaron que no pasó del plato, anotandole una bola al lanzador Julio Urías. Los fans no se creían lo que vieron, y todavía un día después en las redes no terminan de procesarlo.
Quizá el siguiente lanzamiento pudo haber sido un home run, o quizá pudo haber acabado el juego perfecto en el siguiente inning, pero ninguno de esos quizá fue lo que se vivió en el juego del domingo. En el siguiente lanzamiento Tauchman conectó un rodado que en su intento de atraparlo Gavin Lux dejó escapar la pelota.
Los Dodgers de los Ángeles se terminaron llevando la victoria sobre los Gigantes de San Francisco 11 carreras por 5, para colocarse en el segundo lugar de su división.
